Franco Torres y Federico Sosa fueron detenidos el pasado 27 de marzo en la comisaría Tercera, luego de lo cual denunciaron haber sido torturados con picanas. A partir del informe patológico que confirmó lesiones con paso de electricidad, la situación de los implicados se tornó mas grave ya que según el fiscal Quadrini el método de tortura “permite trazar un paralelismo con lo ocurrido durante la última dictadura militar, la aplicación de un tormento con la utilización de picanas eléctricas, agravado además por ser utilizado por una institución oficial. Los tratados internacionales a los que adhiere el país contra la tortura se aplica en cada causa, a partir de ahí califico estos hechos como vejaciones gravísimas, ilegales previstas en el artículo 144 bis el Código Penal mas vejaciones por los golpes recibidos, lesiones y torturas”.
 

En tanto, aún resta determinar a los responsables de los hechos denunciados ya que “así analizamos la cadena de custodia, es decir quién lo detuvo, dónde lo tuvieron, dónde lo llevaron y cómo. Como ninguna de las víctimas puede identificar a los policías, la documentación y libros de guardia nos permite establecer a numerosas personas en calidad de co autores, todos participaron de forma activa en la consecución de esa conducta”, sostuvo el fiscal en declaraciones al portal Actualidadtdf.
 

“Las nueve imputaciones surgen de ahí, solicitamos detenciones e indagatorias, porque la calificación legal de estos hechos impide una excarcelación, con el agravante de haber sido cometidos por funcionarios policiales”, apuntó.
 

Además, aclaró que más allá de la determinación de los autores de las torturas, se debe determinar la responsabilidad de “aquellos funcionarios de mayor rango que por acción u omisión no evitaron que esto sucediera y habiéndolo sabido, no lo denunciaron”. No obstante agregó que si bien “no son partícipes del delito de tortura, son autores de las omisiones o incumplimientos”.


Por ello, confirmó que las imputaciones solo llegan hasta el oficial jefe de guardia “que tendría en este caso un rol de partícipe necesario porque se comunica sabiendo que a los chicos los habían llevado y sin su aporte esto no hubiera sucedido”. “Respecto de los jefes de la comisaría, estoy pidiendo la indagatoria por omitir o hacer cesar estos hechos, cuando estaba bajo su competencia, y omitir denunciarlo porque lo único que hace uno de los jefes fue denunciar la rotura del parabrisas de un móvil y las lesiones de un policía”.


Por el momento las detenciones alcanzan a personal de la comisaría Tercera y dos funcionarios policiales de la comisaría Primera, con los que se cruzaron en la guardia, “asimismo estoy reservando poder ampliar la requisitoria respecto de la comisaría Primera, de otros funcionarios mas altos que hayan participado de esta omisión”, finalizó Quadrini.